Entre los cambios que dispuso el Decreto 963/2018, el Gobierno actualizó los montos a partir de los cuales se pueden realizar contrataciones directas y sumó a los secretarios de Estado a la lista de autorizados para contratar gastos por hasta $128 millones, por lo que estos funcionarios recuperan una facultad que tenían cuando eran ministros.

A comienzos de septiembre de este año, varios ministerios del Gobierno se convirtieron en secretarías de Gobierno y, por ello, se introducen estos cambios a los efectos de definir la competencia de los mismos.

La legislación vigente hasta ahora no permitía a los secretarios tomar algunas decisiones como, por ejemplo, ordenar pagos y efectuar desembolsos y las habilitaciones para pagar contrataciones o adquisiciones. Por esa razón se tomó la medida de ampliar las atribuciones de los secretarios para «dotar de mayor operatividad la gestión de autorización y la aprobación de gastos, así como de los procedimientos de selección», por lo que el Gobierno consideró necesario también modificar el valor del módulo que se utiliza para determinar el tipo de licitación o concurso, que subirá un 60% (sesenta por ciento).

El módulo es una medida de valor equivalente a unos $1.000 que, a partir del nuevo decreto presidencial, pasó a ser de $1.600. Ahora, por ejemplo, un secretario de Gobierno podrá ordenar una licitación y concurso público o privado o subasta pública hasta un importe de 80.000 módulos, es decir, hasta $128 millones; y una compulsa abreviada y adjudicación simple cuando sean 50.000 módulos, unos $80 millones.

A partir de los cambios, cuando el monto estimado del contrato sea el parámetro que se utilice para elegir el procedimiento de selección, se deberá considerar el importe total en que se estimen las adjudicaciones, incluidas las opciones de prórroga previstas.